Familiares, amigos y excompañeros de Johan Sequeiros Acero, joven que extrañamente murió al interior de una celda de la Comisaria de Abancay, realizaron una movilización y plantón en el frontis de la Región Policial de Apurímac. Los manifestantes exigen justicia tras cumplirse más de 60 días de su deceso e indican que en la pericia de parte, concluye que la víctima presentaba hematomas por golpes.
Según el padre de la víctima, el primer resultado de la necropsia realizada en Abancay, concluyó que su hijo falleció por un edema cerebral y un edema pulmonar, pero la necropsia de parte que realizó por su cuenta concluye que la víctima recibió un golpe con un objeto contundente en la cabeza, provocándole una convulsión y luego murió.
En los carteles se podían observar inscripciones como: Johan no murió por asfixia, lo mataron a golpes. Prisión preventiva para oficiales implicados en la muerte de Johan. Los manifestantes también mencionaron que el caso está a cargo de la Fiscalía de Derechos Humanos, pues se trataría de una presunta muerte por tortura.
Tras este plantón, el grupo de manifestantes continuo desplazándose por las calles, exigiendo justicia y una exhaustiva investigación por este hecho que conmocionó a la ciudadanía abanquina hace más de 2 meses atrás.