Durante los tres días del congreso, se desarrollarán ponencias, testimonios, celebraciones eucarísticas y momentos de oración, con la participación de miembros del clero, agentes pastorales, jóvenes voluntarios y personas enfermas y ancianas procedentes de diversas jurisdicciones eclesiásticas del país. Además, se contará con la presencia de representantes de la Conferencia Episcopal Peruana y delegados de distintas diócesis que trabajan en la pastoral de la salud y la pastoral social.
El evento busca también fortalecer las redes de acompañamiento pastoral hacia los enfermos y ancianos, fomentando una labor más comprometida desde las parroquias, comunidades religiosas y movimientos laicales. Los organizadores resaltaron que este congreso pretende inspirar un cambio de actitud frente a la enfermedad y la vejez, promoviendo el amor al prójimo como expresión concreta de la fe cristiana.
Con este importante encuentro, Abancay se convertirá en el epicentro nacional de reflexión y compromiso por la dignidad de los más vulnerables, reafirmando el mensaje de esperanza y misericordia que la Iglesia busca transmitir a toda la sociedad. La Diócesis invitó a toda persona de buena voluntad a participar y unirse en oración por el éxito de este acontecimiento que marcará un hito en la pastoral del cuidado humano y espiritual en el Perú.